1. Comience boca arriba con las rodillas dobladas en una posición de crujido. Inhalar.
2. Con los abdominales contraídos, exhale y levante las caderas del suelo e intente alcanzar las piernas dobladas hacia el techo.
3. Recuerde levantar desde las caderas en lugar de balancear las piernas. Trate de hacer una pausa en la parte superior por un momento.
4. Inhalar. Vuelva a colocar las piernas dobladas en el suelo lentamente. Este es un movimiento pequeño, así que tómate tu tiempo para sentirlo realmente en tus abdominales.